El 17 de octubre iniciamos la temporada de plantaciones y siembras en nuestras reforestaciones participativas. La primera en activarse ha sido la Reforestación del Sacromonte que estamos realizando dentro del Programa de Voluntariado Ambiental Territorio Alhambra.
Hay que recordar que esta zona la empezamos a restaurar con la plantación de aproximadamente un centenar de ejemplares antes del inicio de la pandemia, en el invierno de 2020. Esas plantas no pudieron ser mantenidas durante ese verano de 2020 lo que produjo una elevada mortalidad. En marzo de 2021 volvimos a plantar casi otro centenar de plantas pero este verano si fue posible realizar un mantenimiento que incluye riegos y arreglos de alcorques.
Esta primera plantación ha sido muy atípica, pues aunque el calendario nos diga que estamos en otoño, el campo dice que seguimos en verano. No ha llovido (casi) nada lo que nos ha obligado a llevar a cabo riegos de implantación abundantes. Si hubiera llovido lo suficiente antes de la plantación, estos riegos los hubiéramos podido obviar.
Desde que empezamos este proyecto en el Sacromonte hemos tenido que luchar con muchos desafíos que han impedido lograr mejores resultados. Primero una pandemia y ahora una sequía que ha hecho que pese al mantenimiento realizado este verano la mortalidad siga siendo elevada. Las circunstancias están siendo contrarias pero nosotros creemos en este proyecto y nos crecemos antes las adversidades movidos, entre otros factores, por la contagiosa ilusión que nos transmiten los voluntarios/as.
A nivel de participación, en esta plantación acudieron 15 voluntarios/as (más algún que otro “espontaneo” que se animó a ayudar simbólicamente). Es cierto que tuvimos algunas bajas de última hora de personas inscritas, algunas justificadas, pero aun así los participantes que acudieron realizaron un gran trabajo. Destacamos un alto porcentaje de nuevas personas que se animaron a coger la azada por primera vez y que esperamos que les haya picado el “gusanillo” y vuelvan a sumarse a más voluntariados.
A nivel ambiental el objetivo era reponer las marras (ejemplares plantados que han muerto) pero además se intentó asumir el reto de aumentar la biodiversidad elevando el número de especies introducidas hasta ahora en esta reforestación. Por ahora, hemos plantado encinas, coscojas, acebuches, adelfas, romeros, cornicabras, lentiscos, lavandas, santolinas, retamas, gayombas y rosales lo que hacen un total de 12 especies utilizadas.
Durante esa mañana de trabajo se plantaron 119 plantas lo que supuso lograr un tercer objetivo que era, no solo reponer las marras, si no aumentar la densidad de plantas en las dos parcelas en las que estamos trabajando. La zona de pinar cercana al Parking de San Miguel alto y la zona incendiada en el Barranco del Negro.
Ahora, lo que se necesita urgentemente es que llueva, que llegue de verdad el otoño. También es importante que se logre financiación para poder continuar con la restauración ambiental de esta zona. Hemos conseguido que el proyecto sobreviva a retos como la pandemia pero nos enfrentamos a muchos desafíos que nos obligan a seguir luchando para lograr la mejora ambiental de esta zona de Granada.
Damos las gracias a Sacromonteando y CaixaBank como patrocinadores necesarios de esta actuación y también a Emasagra por colaborar cediendo el agua (más necesaria que nunca).
Por último, un reconocimiento especial para esas mujeres, hombres e incluso niños y niñas que están trabajando activamente en la mejora de su planeta.
Galería fotográfica de la jornada:
Preparadas para su nuevo hogar Con mimo Riego de implantación En el pinar Trabajos en pendiente Cualquier edad Composición Con vistas El secreto está en el alcorque Cubos donde no llega la manguera En la zona incendiada Compañerismo Esfuerzo Trabajando con paisaje