Debido a la crisis sanitaria que estamos sufriendo por el COVID-19 tuvimos que suspender las últimas plantaciones con voluntarios previstas para marzo de 2020. Ahora confinados en nuestras casas, miramos por las ventanas viendo esta lluvia que tan bien les estará sentando a las plantas. Estamos deseando salir otra vez al campo para retomar la actividad e iniciar el mantenimiento, marcaje, censo, etc. Desde nuestros hogares tenemos ganas, pero no posibilidades, de trabajar en estas restauraciones forestales (a este sector no ha llegado el teletrabajo).
Hemos aprovechado este tiempo de obligado paréntesis para mirar cómo hemos ido aprendiendo y mejorando nuestras reforestaciones participativas. Hace muchos años que hacemos este tipo de voluntariado ambiental, ahora vamos a remontarnos a nuestros inicios.
Recordamos con cariño nuestras primeras reforestaciones que hicimos con escolares en Molvízar en la temporada 2002-03 tras unos incendios forestales que sufrió este municipio. También nuestro trabajo en el programa Plántate que iniciamos en 2004 y realizamos durante tantos años en el Parque Nacional Sierra Nevada. Esos fueron nuestros orígenes y nuestro aprendizaje, posteriormente hemos hecho trabajos como construcción de albarradas de piedra en seco para luchar contra la erosión, cercados de protección, trabajos de viverismo, censos y seguimientos de reforestaciones, etc.
Pero como hemos dicho, vamos a restringir nuestra mirada a los últimos años, nos hemos puesto de referencia la temporada 2016-17, cuando empezamos a trabajar en una pequeña parcela en la Dehesa del Generalife. En esta hicimos una plantación en diciembre de 2016 con planta procedente del Vivero de la Resinera, plantamos 226 plantas de cuatro especies, encina, romeros, majuelos y rosales. Hasta febrero de 2019 no volvimos a esta parcela para plantar 100 ejemplares más, pero con una mayor biodiversidad de especies. Esta parcela ejemplifica una de las principales diferencias, como hemos ido incorporando una «paleta» cada vez más amplia de especies.
En la temporada 2017-18 empezamos varias parcelas, algunas fueron plantaciones que son intervenciones puntuales y con un objetivos muy concretos, como la que hicimos en noviembre 2017 en Centro de Actividades Deportivas del Cubillas dependiente de la Universidad de Granada (cuando plantamos 224 ejemplares). El objetivo era diversificar un pinar de reforestación (como fin en sí mismo pero también con futuros usos educativos) y contábamos con la ventaja de que esta instalación se comprometió al mantenimiento de estas plantas.
En esta misma temporada asumimos otro proyecto que no hemos finalizado, pero en el actuamos en diciembre de 2017 y 2018. En este caso el objetivo era diversificar un pinar de reforestación a lo largo de un sendero universal para personas con problemas de movilidad. Este equipamiento está en el Parque Periurbano de la Dehesa de Santa Fe. En total plantamos 441 ejemplares pero consideramos que este proyecto esta inacabado. Hemos avanzado mucho en los últimos años, pero desgraciadamente no hemos conseguido la más que necesaria continuidad en algunas de nuestras reforestaciones. Intentaremos retomar este proyecto cuando logremos los fondos requeridos.
Por último, en la temporada de 2017-18 iniciamos nuestro buque insignia, el Parque de las Canteras en la Zubia en las faldas de Sierra Nevada, en una antigua explotación minera. Es nuestra mayor parcela en cuanto a la cantidad de ejemplares introducidos (unas 1.200 plantas), en cuanto a número de especies (unas 26 especies), área de actuación, etc.
Es la parcela más difícil por la escasa cubierta vegetal previa (poco suelo, mucha insolación, etc.) y la que está requiriendo un mayor mantenimiento y riego. Pero por contra es un lugar lleno de oportunidades, pues tenemos suministro de agua cercana lo que ha facilitado la realización del mencionado mantenimiento y riego que ha supuesto el gran salto en la calidad de nuestros trabajos forestales. Por otro lado, su proximidad y accesibilidad consideramos que es una de sus fortalezas como recurso para la educación y la participación ambiental.
También ha sido y sigue siendo un lugar donde hemos experimentado técnicas y recursos que no habíamos podido poner en marcha por falta de recursos y de la necesaria continuidad en el proceso de restauración (es un proyecto que por ahora hemos logrado mantener con vida). En estas parcelas hemos generalizado el uso de protectores para evitar herbívoros y sombrear las plantas. También hemos iniciado pruebas de restauración de la cubierta vegetal usando «bombas de semillas» y la siembra directa de bellotas. Ahora estamos intentando incluir los Sistemas de Información Geográfica como herramienta para mejorar el seguimiento y la planificación.
Por último, en esta misma temporada 2019-20 hemos logrado abrir 2 parcelas nuevas, ambas tienen como característica su carácter periurbano. Hemos visto tras los últimos años de experiencia acumulada que la accesibilidad y proximidad de estas reforestaciones tiene muchas ventajas logísticas pero también de visibilidad de los proyectos. Uno de ellos los estamos realizando en el Campus Universitario de Cartuja, con un total de 246 ejemplares plantados, con protectores, bombas de semillas, mantenimiento, riegos, etc. Una parcela que ejemplifica todos los avances que hemos hecho hasta ahora. La última parcela que hemos abierto es en el Sacromonte, en ella por ahora sólo hemos plantado 109 ejemplares y todavía no tenemos garantizada su continuidad, pero pretendemos continuar.
En definitiva, si tenemos que explicar en que han cambiado nuestras intervenciones podemos decir que hemos incluido más diversidad de especies y de técnicas de restauración y sobre todo, hemos logrado en algunos de nuestros proyectos una necesaria continuidad que nos permite ir más allá de la actuación puntual. Esto desde el punto de vista ambiental. Otro tema que para nosotros es relevante son los resultados educativos (tanto para los participantes directos como para el resto de la sociedad), aquí también hemos logrado introducir mejoras. Nos referimos a la divulgación de las actuaciones hacia la sociedad y sobre todo a la captación, comunicación, sensibilización, formación, motivación, etc. hacia el voluntariado. Para nosotros tan importante es la mejora ambiental como la educación que logramos mediante la participación ambiental. En otra ocasión, os describimos esta parte que en ocasiones no se cuida lo suficiente.
Nos hemos dejado algunas intervenciones, por ejemplo, algunas pequeñas reforestaciones que se incluyen en actuaciones de voluntariado más amplias, como algunas que hemos realizado en la RNC en la Charca Suárez, como naturalización de nuestras «Charcas Ecocampus» o dentro de proyecto de mejora ambiental en la Acequia Real de la Alhambra. En algunos casos las intervenciones de reforestación han estado integradas en proyectos de restauración y mejoras ambientales más amplias.
A groso modo podemos decir que, desde el otoño de 2016, llevamos unos 2.500 ejemplares plantados de cerca de 30 especies diferentes. Muchos de estos ejemplares han disfrutado (o disfrutan) de un mantenimiento y seguimiento de al menos 2-3 años (desgraciadamente no hemos podido extender estos cuidados a todos los casos en los que era necesario).
Por último, podemos decir que en esta campaña 2019-20 se han plantado casi 900 ejemplares (en tres parcelas diferentes) de los que el 90% van a disfrutar de un mantenimiento-riego durante este verano de 2020. Una lástima que se anularan por la crisis sanitaria las últimas plantaciones que hubiera elevado esta cifra en más de 200 ejemplares más.
Y por supuesto, este trabajo no lo hubiésemos podido realizar sin el apoyo de distintas entidades y programas (Ecocampus, Asociación Reforesta, WWF-España, Auca Santa Fe, Proyecto Libera, Ayuntamiento de la Zubia, Universidad de Granada, etc. perdón por los que no han sido mencionados en esta enumeración) y sobre todo, gracias a la implicación, motivación y cariño de los principales actores de estas jornadas de participación ambiental, todos aquellos que de una manera totalmente desinteresada habéis puesto vuestro esfuerzo, vuestra experiencia, vuestra alegría y vuestra ilusión en mejorar nuestro entorno más inmediato. A todos vosotros GRACIAS Y HASTA PRONTO.
Te recomendamos que conozcas mejor los proyectos de Voluntariado que tenemos en la actualidad abiertos (bueno en «paréntesis por pandemia»).
Proyecto de Reforestación en el Parque de las Canteras (La Zubia) en el E.N. Sierra Nevada
Proyecto de Reforestación en el Campus de Cartuja de la Universidad de Granada
Voluntariado Ambiental Territorio Alhambra
